Respuesta para mi hijo
Hijo no pierdas tu dulzura
Cuando me veo en el espejo.
la dureza de estos tiempo
se refleja en mi rostro.
Los rasgos en mis ojos sonríen
como en otros buenos tiempos.
Espejo de mi sangre, hijo tierno como el pan,
tú que eres inquieto
con una carga de sueños
estamos atravesando
el tiempo mas difícil de este país,
igual o peor a la guerra federal,
como lo que tu has leído en nuestro libro de historia.
Para ti nace en este país
donde despertaste los sentidos
de tu primera vigilia las luces y los colores
y al sonido de la música.
Mira al país dulcemente y retozar en el
el riachuelo que pronto alegrará
estas tierras.
Rio de luz donde sale la vida
corrientes de agua pura y cristalina
Lo que fue un sueño
volverá por estas tierras.
Paso a paso me acerco
a tu mirada y me encuentro
a mi mismo.
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